« Un partido de ajedrez! Jamas yo hubiera aceptado jugar con ese hipócrita de Bertolais », pensó Renaud mientras El y sus 3 hermanos galopaban sobre la espalda del caballo Bayard.
A pesar del peso, Bayard corría tan rápido como el viento atravesando los ríos y valles muy velozmente. Huyendo hasta las profundidades de los bosques Ardenneses los 4 hermanos hijos del Duque Aymon, Renaud , Allard , Guichard y Richard encontraron a su primo Maugis y le contaron la triste aventura.
-Nosotros venimos de París. Carlomagno nos persigue, le contó Renaud.
El emperador me había nombrado Caballero, pero su sobrino, celoso, me provoco entonces a jugar un partido de ajedrez. Nosotros discutimos , yo estaba enojado y accidentalmente lo mate. Sin Bayard nosotros estaríamos ya ahorcados!
-Mis queridos primos, Mi corazón nunca ha estado con Carlosmagno, ustedes lo saben, ustedes pueden contar con mi ayuda, les respondió Maugis.
Los dotes encantadores de Maugis son reconocidos en toda la región. Con su preciosa ayuda, los hermanos Aymon hicieron la Fortaleza de Montessor sobre una peña que dominaba sobre Meuse.
todos se refugiaron allí.
Esta vida apacible duró varios años, pero un día, Carlosmagno los encontró. Determinado por vengarse, el persuadió a un joven y le convenció de abrir las puertas del castillo.
-Oh no!! nosotros somos traicionados! grito Renaud escuchando los gritos de los hombres.
Con fuerza y coraje, los hermanos pelearon contra sus enemigos, luego huyeron con Maugis y Bayard por un pasadizo subterráneo hasta el bosque.
- Mis primos, no teman. Sirvamonos de las causas mas nobles que nuestra huida!
Les propuso Maugis. Yo escuche decir que el Rey Yon de Gascogne esta luchando contra los Sarrasins. Allí una lucha digna de nuestro orgullo!
Convencidos, los hermanos cabalgaron hasta Gascogne donde con la ayuda del fantástico Bayard, ellos completaron verdaderas proezas. A tal punto que el Rey Yon les ofreció el castillo de Montauban como recompensa.
Pero el tiempo no opaco el deseo de venganza de Carlomagno. El tratando de engañar los hijos de Aymon, les ofreció la paz, y mando a sus soldados al castillo.
Los 4 hermanos hubieran muerto si Bayard no hubiese intervenido con mordidas y patadas.
Carlosmagno esta furioso.
- Que sitien el castillo! grito El a sus hombres.
Un gran encierro comenzó, en la Fortaleza los habitantes mueren de hambre. Los hermanos debían beber la sangre de Bayard, el único animal en pie, para no perecer ellos.
Pero cuando todas las esperanzas estaban perdidas, Renaud descubrió por milagro un pasaje subterráneo el cual les permitió escapar nuevamente.
Todos estos años de persecución y combate pesaban sobre los hombros de los hermanos y los caballeros de Carlomagno. Tanto así que el emperador acepto finalmente dar una oferta de paz.
El dejara de perseguir a los hijos de Aymon con la condición que el caballo Bayard le sea entregado y que Renaud parta en peregrinaje a Jérusalem.
Al final, Renaud acepta el trato. La paz la lleva El y el caballo.
Renaud entrega el caballo al rey y toma sus cosas para partir en peregrinaje.
Renaud entrega el caballo al rey y toma sus cosas para partir en peregrinaje.
- Este caballo me ha causado muchos problemas, amarrarle una piedra de moler al cuello y lanzadlo a la Meuse! ordeno Carlosmagno a sus hombres.
Bayard es tirado al agua a sus oscuras profundidades. El caballo se mueve desesperado y agonizante, de un golpe de pezuña logra agrietar la peña y alcanza salir del río para huir a los bosques Ardeneses.
Hoy en día, muchos cuentan que han escuchado a lo lejos el fabuloso caballo Bayard y sus relinches desesperados por no poder encontrar a sus amos.
Textes : Aurélie Garnier, TV5.ca
Illustrations : Alexandra Myotte
http://focus.tv5monde.com/legendesfrancaises/les-quatre-fils-aymon-cheval-bayard/
Texto al español :Lee Perez
Namur , Belgica
